Realmente le echaba de menos. Su vida había cambiado de forma radical desde aquel día y aunque al principio no se dio ni cuenta , poco a poco, la sensación de que algo estaba faltando se fue haciendo cada vez más palpable.
Su ausencia llenada con mil cosas que tenia pendientes, el cerebro altamente ocupado en resolver, crear y fomentar sus inquietudes, le ocupaban el día a día.
Pero ese eco de fondo se fue abriendo paso y se convirtió no ya en un rumor lejano, sino mas bien en un grito, tremendo y poderoso.
Pero ese eco de fondo se fue abriendo paso y se convirtió no ya en un rumor lejano, sino mas bien en un grito, tremendo y poderoso.
Echaba de menos su sarcasmo, su forma discrepante de ver la política, el terrible caracter, sus poemas y la alegría que inspiraba a su vida.
Lo peor era que no sabia el porqué, pero reflexionando, era lo habitual en la vida, "la gente va y viene, los amigos entran y salen"
Sin motivos, sin adióses, desapareció de su vida.
Fotografía: Crater Darzava
9 comentarios:
Seguro que alguien así es para echar de menos.
Lo de menos es el porqué, lo importante es el sentimiento.
Besos.
Lo mejor es saber dar y recibir lo mejor de cada uno con sinceridad y afecto. Así lo dado y lo recibido nunca será efímero.
Anda.... que tus entradas no sean tan espaciadas.
Un abrazo
Cristina
pues sí todo es un ir y venir, hasta nosotros mismos.
pero tú has vuelto porque nunca te has ido del todo.
biquiños.
Una reflexión tan cierta como sabia.
Aunque sea así no nos debe distraer del camino ni del destino, forma parte del trayecto.
Besis
El título del post me viene bien para este comentario que espero que te de coraje. Como te comenté en facebook, te deseo todo lo mejor en esta etapa de la vida.
Besos, un abrazo y mi apoyo.
"la gente va y viene, los amigos entran y salen"
así es pero hay amigos que permanecen, esos hay que cuidarlos
Saludos
Era un antiguo monstruo submarino...
Era un ave solitaria...
Era, ella, una hermosa leyenda...
¿Por qué no me lo has dicho?.
La historia del micro muy en tu línea, recordada y añorada.
Es posible, pienso yo, que a veces sea mejor así..., desaparecer sin adioses, incluso aunque no haya motivos.
Bicos de bienvenida.
P.D. Yo también regresaré, seguro.
En el continuo fluir que es la vida los cauces divergen a veces...pero al final, la mar nos espera.
besos
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